Ahora si, para tranquilidad de Ana, que me hizo notar la ausencia de esta nota, les cuento que la semana pasada ( o la otra...a esta altura ni recuerdo en una agobiante tarde de calor, en la sede del Artigas se festejaron los 25 años del jardín de infantes 138.
El salón grande del tricolor de la calle Elena Navarro, estaba repleto y no solo de gente, como lo ven en las fotos.
Sudábamos más que "chancho atado", y para colmo la cantina estaba cerrada, así que ni una misera agua mineral podíamos comprar, el cantinero sinceramente estaba con las "luces cortas" ese día, porque con cerca de 500 personas encerradas en lo que se parecía mucho a una sauna tamaño familia, no abrir la cantina.....ayy dios mío!!!
Pero bueno, hablando directamente del acto, muuuy bueno, los gurises bailaron, cantaron, sapatearon y obvio....sudaron (y la cantina seguía cerrada).
De arranque salío hablando....hablando.....hablando.....mi amiga Myriam Gutierrez, quien con lujos de detalles contó practicamente año a año (y funcionario a funcionario) la historia de las 25 primaveras del jardín
Personalmente creo que estos eventos siempre nos traen gratas sorpresas, y no quiero destacar a ningún grupo en especial para no ser injustos con los demás, pero la verdad que puede sonar a una frase hecha pero hay que felicitar a todos los gurises, y obviamente a las maestras y maestros responsables de las distintas coreografías y representaciones, pero una cosa si quiero dejar claro, la mayor sorpresa para mi no estuvo en los bailes, ni en el calor y mucho menos en la cantina cerrada, sino en que descubrí que "La coca" no se llama "coca", sino que en el diploma de reconocimiento que recibió junta a Sonia y Mariluz está estampado bien fuerte y claro: "Ernestina Cantos" y ese fue mi descubrimiento del año!!!!
Personalmente creo que estos eventos siempre nos traen gratas sorpresas, y no quiero destacar a ningún grupo en especial para no ser injustos con los demás, pero la verdad que puede sonar a una frase hecha pero hay que felicitar a todos los gurises, y obviamente a las maestras y maestros responsables de las distintas coreografías y representaciones, pero una cosa si quiero dejar claro, la mayor sorpresa para mi no estuvo en los bailes, ni en el calor y mucho menos en la cantina cerrada, sino en que descubrí que "La coca" no se llama "coca", sino que en el diploma de reconocimiento que recibió junta a Sonia y Mariluz está estampado bien fuerte y claro: "Ernestina Cantos" y ese fue mi descubrimiento del año!!!!
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