Por lo visto, el dios Eolo anda medio boleado, se le entreveraron los cables y confundió jueves con viernes, solo eso explica que el viento que había ayer, no se repitió hoy, pero obviamente eso no fue excusa para salir a remontar cometas, y juntar Marcela, sino que al contrario, los tranquerenses siempre estamos buscando una forma de solucionar los inconvenientes, y ya que el viento no quiso venir, nosotros fuimos a él, resumiendo muchísima gente se fue a la subida de pena, (o bajada, según si vamos o si venimos) a aprovechar el viento que siempre esta presente el lo alto de la Cuchilla Negra.
Y como no podía ser de otra manera, hasta ahí fui yo, para poder traerles material sobre este viernes santo.
Lo primero que ví me sorprendío gratamente, y es lo bien que van marchando las obras de ensanchamiento y posterior renovación de asfalto en la famosa subida.
Sin lugar a dudas es un trabajo que es por demás necesario, ya que ese tramo, lo que tiene de bello tiene de peligroso, y con el asfalto como estaba, realmente se transformaba en una trampa muchas veces mortal.
Ya era hora que se realizara dicha reparación, y prometo seguir acercando material sobre los avances de la obra.
Volviendo a las cometas, muchas, muchas mismo se vieron en la cima del repecho, por suerte tenemos esa posibilidad de gambetear las trampitas que nos juega el tiempo y así poder cumplir con la tradición de enviar al cielo las multicolores “pandorgas”
Y como no podía ser de otra manera, hasta ahí fui yo, para poder traerles material sobre este viernes santo.
Lo primero que ví me sorprendío gratamente, y es lo bien que van marchando las obras de ensanchamiento y posterior renovación de asfalto en la famosa subida.
Sin lugar a dudas es un trabajo que es por demás necesario, ya que ese tramo, lo que tiene de bello tiene de peligroso, y con el asfalto como estaba, realmente se transformaba en una trampa muchas veces mortal.
Ya era hora que se realizara dicha reparación, y prometo seguir acercando material sobre los avances de la obra.
Volviendo a las cometas, muchas, muchas mismo se vieron en la cima del repecho, por suerte tenemos esa posibilidad de gambetear las trampitas que nos juega el tiempo y así poder cumplir con la tradición de enviar al cielo las multicolores “pandorgas”
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