Una semana movidita – Parte 1 – El Jardín

Las payasas "coque" no se que y "coque" no se cuanto presentes..
Abuelas bailando el Hula Hula ( o ula ula)
Lo que es la tecnologia eh!!!
La "turma" de Caperucita y la "mariquita" con pollera
Los niños encantados con la Cenicienta y el Principe

Diferentes actividades, entre ellas el viaje a la capital con la ilusión de ver a Uruguay clasificar directo al mundial, hicieron que fuera imposible ir subiendo material durante la semana, pero no crean que se van a ver libres de mi así tan fácil, por eso hoy estoy acá, pronto para resumirles lo que fueron estos últimos días en nuestra ciudad, y porque no en nuestro paisito, ya que estuvimos todos pendientes del partido con Argentina que se jugó esta semana, y la verdad fue una noche de mier…coles.
Arrancamos por el viernes 9, cuando en el Jardín Nº 138 se festejó el día del niño escolar (o algo así, es que son tantas fechas nuevas que flor de boleo me agarro) donde en una muy linda tarde, se realizaron muchas actividades interactivas, o sea hablando a lo bruto participaban docentes, alumnos y padres (y algunos abuelos también)
Los docentes y funcionarios del jardín en su totalidad estaban con fantasías de las más variadas, desde mariquitas “con pollera”y payasos hasta trencitos y elefantes.
Como parte de las actividades, los padres de cada grupo, tenían que hacer distintas representaciones o bailes, dentro de lo cual quien escribe tuvo que ponerse en la piel del lobo feroz para interpretar junto a tres madres el cuento de caperucita roja en versión ecológica, ya que no era la tradicional historia en si, sino que con variantes apuntando al cuidado del medio ambiente (ahh!! Y el lobo no tenía que comerse a caperucita)
Abuelos moviéndose al ritmo del hula hula (aclaro que después de media hora de discusión con mi correctora ortográfica si hula hula es hula hula o ula ula, decidí poner con H y que sea lo que dios quiera) niños bailando e interpretando la “Polca de los negros” al son del bandoneón afilado del popular Rafael “indio” de Souza, quien hacia vibrar el instrumento con los acordes de “Flor del bañado” apoyado siempre sobre su mantita faldera.
Se realizo la representación del cuento de la cenicienta, en lo que fue uno de los puntos altos de la jornada.
También las simpáticas jóvenes del grupo “Esperanza” marcaron presencia en esta fiesta bailando y contagiando a todos los presentes.
Sin lugar a dudas, un muy buen ejemplo de integración e interacción entre varias generaciones, que esperemos se repita año tras año.

Comentarios

caperucita roja dijo…
el lobo esta para comerselo jajajja