No quiero ser amargo, pero...

Quiero pedirles que lean el cometario de Tramperoman en la entrada llamada “Tranqueras solidaria”, sin lugar a dudas, todo lo que dice esta cubierto de razón.
No quiero con esto empezar a “tirar mala onda” sobre lo que esta haciendo la gente de nuestro pueblo, al contrario nuevamente quiero destacar la enorme solidaridad de los tranquerenses que no midieron esfuerzo para ayudar al prójimo, muchos incluso desde el mas absoluto silencio o anonimato, yendo a cocinar, a lavar, a limpiar los baños donde se encuentran los evacuados, en fin realizando las mas diversas tareas con el único fin de dar un mano a quien lo necesita, pero lamentablemente muchas veces los “necesitados” se olvidan que tienen también manos, que pueden ayudarse, que deben ayudarse y no solamente esperar que otros vengan a hacer lo que ellos perfectamente pueden hacer, es una cuestión de dignidad, de autoestima, de decir “me golpearon, pero no me derribaron”.
He sabido de gente que estando evacuada, se a dado el lujo de rechazar la comida que mando la intendencia porque “era polenta con agua” por favor... también supe de otros que estaban acostados mirando tele en la sede mientras los voluntarios le servían el desayuno, y no hablo de un niño, sino de un padre de familia que pienso yo tendría que dar el ejemplo.
También he visto padres con niños paseando tranquilamente bajo la lluvia sin importarles que se mojaran la ropa, total “si se moia, tiro esta y me dâo otra” y no es así la cosa, TODOS tenemos que colaborar, incluso los que necesitan colaboración.
“Quero um colchâo, mas de duas plazas” eso dijo una señora que ya había recibido varios colchones pero parece que no eran de su agrado.
Tal vez muchos en estos momentos me estén criticando, o no estén de acuerdo con lo que escribo, pero me parece que es necesario decirlo, porque obviamente no todos los damnificados son así, pero hay gente que se aprovecha de la bondad ajena y eso puede traer como consecuencia que futuramente (ojala nunca más sea necesario) muchos piensen dos veces antes de hacer una donación o ponerse a trabajar por los demás, si bien las personas que lo hacen, no están pensando en eso, sino que solamente en ayudar, pero...todo tiene un limite.
También quiero recordar que donar no es “dar lo que no sirve” sino que colaborar con algo, repartir lo que tenemos con los que no tienen, no usemos esto para deshacernos de los pantalones con una sola pierna que tenemos guardado desde que el niño lo cortó para hacer la cola de la cometa en turismo, o de la camiseta que el agujero mas chico es el de poner la cabeza, sino que vamos a dar cosas que realmente se puedan usar, eso va a facilitar enormemente la tarea de quien esta separando y distribuyendo las donaciones.
La solidaridad de nuestra gente es fantástica, es un don que talvez no todos los pueblos lo tengan, por eso tenemos que cuidarla y mantenerla viva.
Antes de irme, quiero que alguien me corrija si estoy equivocado, pero no vi señales de la iglesia católica ofreciendo colaboración, muchas veces escucho los sermones brindados en la radio, y la verdad son muy lindos, pero... ¿como queda en la practica?
Sé de “cultos” como se dice vulgarmente que han estado presentes y colaborando, no solo con donaciones sino que ofreciendo sus instalaciones para los desabrigados, pero sinceramente no escuche la voz de nuestra principal iglesia en ningún medio de comunicación ni me entere de aportes realizados, ojala todo sea por falta de información de mi parte.